1. El abogado que lee (no solo códigos, jurisprudencias y leyes, sino historia, filosofía, literatura, etc.) siempre estará un paso adelante de aquel abogado que no lee.
2. El abogado que lee (por ejemplo: obras literarias) adquirirá un mayor vocabulario y tendrá a su disposición una variedad de palabras que podrá emplear en sus escritos.
3.. El abogado que lee es aquel abogado que se preocupa por su preparación profesional y personal, porque sabe que la lectura ampliará su mente.
4. El abogado que lee fomenta la curiosidad por conocer no solo la trama de lo que lee, sino el significado de varias palabras nuevas que encuentra en las lecturas que revisa y analiza.
5. .El abogado que lee aumenta su capacidad de concentración y comprensión, pues empieza a tener una visión distinta del mundo que lo rodea y analiza mejor cada situación de la vida.
6. El abogado que lee desarrolla la creatividad y esto, muchas veces, logra que desee escribir sus propias obras, pues comienza a darse cuenta que él también quiere dejar una lección, una enseñanza y un legado a las futuras generaciones de abogados.
7. El abogado que lee adquiere cultura y también empieza a mejorar su redacción, pues al leer varias obras, se da cuenta de la escritura correcta de varias palabras a la vez que empieza a conocer términos nuevos que empleará en sus escritos.
8. El abogado que lee deja atrás el pensamiento mediocre "no importa si escribo mal, lo importante es que se me entienda", pues se da cuenta que escribir (redactar) de manera equívoca es una falta de respeto hacia quien lo lee.
9. El abogado que lee empieza a adquirir una capacidad y visión crítica de la vida, lo cual hace que reflexione sobre muchos problemas y tenga a su disposición más opciones y posibilidades de asumir y afrontar las situaciones adversas.
10. El abogado que lee, con el tiempo, se vuelve investigador y a medida que lee comenzará también a desarrollar un léxico formidable a la hora de exponer o dar alguna conferencia, pues el vocabulario que adquiere, gracias a las lecturas, empezará a reflejarse en sus disertaciones y pronunciamientos en los tribunales.
Autor del decálogo: David Efraín Misari Torpoco (Profesor Misari)
27 de setiembre de 2023
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