En la actualidad, existen algunos abogados que se «creen»
superiores o más inteligentes que otros, pero ¿realmente lo serán? Alguna vez
te has preguntado «¿cómo puedo saber mi nivel de IQ?
Uno de los modelos o métodos para llegar a saber es
denominado «La Escala Wechsler» que logra medir la Inteligencia para Adultos y
por ende, es destacado como el método más confiable internacionalmente, puesto
que es uno de los que abarca más capacidades cognitivas.
¿Por qué se habla del IQ? Para esto, se debe entender que el coeficiente
intelectual (IQ en inglés) es reconocido como uno de los métodos para
evaluar la inteligencia humana. Para esto, la Escala Wechsler es la prueba más
aceptada internacionalmente de Inteligencia para Adultos. Este método
fue creado por David Weschsler (psicólogo).
La prueba de Wechsler no solo evalúa la capacidad
intelectual, sino que también analiza las habilidades cognitivas
detalladamente, incluyendo el razonamiento, la memoria y la comprensión verbal.
Ahora bien, para calcular el IQ (CI) de una persona, uno
debe recurre a la siguiente fórmula
IQ = Edad intelectual ÷ Edad real x 100
Además, debe considerar diversos factores como el número de
respuestas correctas, el tiempo utilizado y la edad del individuo.
Los resultados se clasifican en distintos niveles: un IQ de
130 o más se interpreta como muy alto, mientras que un puntaje entre 115 y 130
es considerado alto. La media se sitúa entre 85 y 115. Un resultado por debajo
del promedio cae entre 70 y 85, y un puntaje menor a 70 se clasifica como bajo.
Aquellos abogados que se encuentran interesados en medir su inteligencia, se
recuerda que existe la opción de desarrollar algún test de IQ en línea, los
cuales ofrecen una evaluación general de las habilidades cognitivas y mentales.
Cuando un abogado se da cuenta que posee un alto coeficiente
intelectual, esto conlleva a una variedad de ventajas importantes que pueden
generar un impacto positivo en diversos aspectos cotidianos. Por ejemplo,
aquellos abogados con un IQ (CI) elevado tienden a sobresalir en el entorno
académico como docentes e investigadores que publican libros y artículos, lo
que les proporciona acceso a oportunidades educativas (académicas) y laborales
más favorables.
Por último, una mayor inteligencia simplifica el ajuste a
circunstancias novedosas y la búsqueda de soluciones creativas a problemas. Se
sabe que una persona es más inteligente que otra, debido a la capacidad mental
para resolver problemas en el menor tiempo posible. Este hecho no solo aumenta
la habilidad para enfrentar obstáculos, sino que también favorece y refuerza el
manejo del estrés y la regulación de las emociones. Así pues, estas cualidades
destacan la relevancia de considerar diferentes tipos de inteligencia además
del coeficiente intelectual convencional, como la inteligencia emocional y la
creatividad con el fin de obtener una comprensión más holística del potencial
humano y desarrollar sus máximas capacidades cognitivas.
Recuerda que la categorización de la inteligencia según el
CI es la siguiente:
Superdotado o muy dotado: 130 o más.
Dotado: 121-130.
Inteligencia por encima de la media: 111-120.
Inteligencia media: 90-110.
Inteligencia por debajo de la media: 80-89.
Inteligencia por debajo de la media: 79-70 o menos.
A continuación te comparto un enlace de la Universidad de
Valencia (España) para que ingreses al test de inteligencia y evalúes tu
capacidad cognitiva:
https://www.uv.es/~buso/iq/index_es.html
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